¡Buenas noches gente! ¿Cuánto tiempo verdad? Bueno ante todo espero que este verano hayáis follado mucho y esas cosas… Además, me gustaría tomarme la libertad de darle una cálida bienvenida a nuestro nuevo compi fucktoy, (mi amor platónico aunque él no lo sabe), y decirle que estoy encantada de tenerlo con nosotras y que vigile su espalda, algún día no muy lejano lo follaré =) Ahora sí, ¡comenzamos!
Esta vez voy a dejar a Aylin aunque volverá y más pronto de lo que esperáis para pasar a recomendaros cositas… Como muchos sabréis y otros no pero ya os lo digo, soy amante de los libros de todos los géneros que existen. Bien, pues hoy os recomendaré algunos a ver si os hago leer a vosotros también aunque bueno confieso que dejas de leer en la segunda hoja y comienzas a tocarte enseguida :P
En esta ocasión comentaré sobre la novela "Las once mil vergas o los amores de un hospodar". En ella se narra parte de la vida del príncipe Vibescu, mejor conocido como Mony, un libertino que de buenas a primeras decide que ya no le basta dejarse sodomizar por el vicecónsul de Serbia, Bandi Fornoski, por lo que se va en busca de mejores aventuras.
El libro describe abundantes escenas que abarcan pederastia, exhibicionismo, vouyerismo, sadomasoquismo, bestialidad, coprofilia, coprofagia y necrofilia; hay sexo homosexual y heterosexual; con sangre, micción, defecación, animales, violencia, etc. Un compendio de pornografía, no apto para gente seria.
Mony igual mantiene relaciones con su ayuda de cámara, el bien dotado Cornaboeux, que con el peluquero y algunos de sus asistentes. Pero también disfruta de las bellas Alexine y Culculine; o de la narración del triste capitán Patache cuando es testigo de las relaciones que su esposa sostiene con hombres y mujeres frente a él.
RESUMEN PARA VAGOS: Este libro, más que erótico, es abiertamente pornográfico, pero el autor lo escribe con tanta gracia, con tal dominio del idioma que convierte el guión obvio en una sorpresa constante.
Es muy difícil encontrar una obra de una procacidad tan salvaje y al mismo tiempo de una finura tan desternillante. Una auténtica burrada genial.
¡Hasta la próxima! ¡Leed, tocaros y follad mucho!